Es para mi un placer reseñar hoy la última obra de Bruno Nievas, a quien tuve el honor de conocer durante el último Speed Dating de Amazon, celebrado en Madrid el pasado Junio. La verdad es que, de primeras, el libro ya me tenía ganado, pues soy muy aficionado a la novela de acción, aventuras, thriller y todo aquello que te mantenga atrapado y en tensión. Pues bien, todo esto y mucho más lo encontrarás en esta novela, que está arrasando desde su reciente publicación por Ediciones B.
Nos encontramos ante un explosivo thriller, que mediante dos tramas separadas en el tiempo pero perfectamente hilvanadas, nos va introduciendo en un relato en el que, aparte de acción y tensión a raudales, podremos contemplar a través de sus personajes principales, las más variadas conductas de la especie humana: desde lo más corrupto y abyecto hasta actos de valentía y entrega que ya casi dábamos por perdidos.
Holocausto Manhattan, nos muestra como etapas tan negras de nuestra historia reciente como la Segunda Guerra Mundial, podrían llegar a repetirse merced a los sueños visionarios de un personaje, que es simplemente la mismísima esencia del rencor. No podrás encontrar un personaje así en ninguno otro libro, probablemente, y sin embargo no se trata de un personaje plano o estereotipado. Conocer sus circunstancias personales, te hará ir entendiendo gradualmente el porqué de su comportamiento y su particular visión del mundo.
Con una prosa cuidada y directa, Bruno, nos hace ver, sentir e incluso oler, lo que está pasando, algo que solo los grandes logran hacer. Si te gusta, sentir todo lo que pasa en un libro (para bien o para mal), como si estuvieras allí mismo este relato te encantará.
Con respecto a la doble trama, bascula muy ágilmente entre el campo de concentración de Auschwitz y el Nueva York actual, e introduce un elemento novedoso, del que probablemente no habrás oído hablar: las drogas sónicas. Éstas están basadas en sonidos que incluyen unas ondas binaurales, que producen ciertos efectos en los individuos que las oyen. Ahora, tan solo piensa en el uso que se podría hacer de ellas. Intrigante. Muy intrigante...
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